La crisis política y judicial que sacude a la coalición de La Libertad Avanza (LLA) se intensifica conforme avanza la campaña en la provincia de Buenos Aires. En el centro de la controversia están los presuntos cobros ilícitos en el área de discapacidad y la gestión de la crisis por parte de sus operadores políticos.
El escándalo de las coimas, que involucra a ex funcionarios y la estructura de la cartera de discapacidad, ha obligado a una operación de contención desplegada desde la cúpula del espacio libertario. La exposición mediática y las filtraciones han elevado la tensión interna en el equipo que acompaña a Milei en la campaña bonaerense.
La tensión crece a medida que las explicaciones oficiales no logran aplacar la preocupación. Fuentes policiales señalan que Spagnuolo, al entregar su teléfono, mostró nerviosismo evidente, reflejando el estado de incertidumbre dentro del grupo.
El escándalo llega en tramo final de la campaña en la provincia de Buenos Aires, con potencial impacto en la evaluación de votos y en la estrategia de comunicación del frente libertario.
Si bien algunos actores intentan restringir entrevistas y mantener un frente unificado, la realidad de las investigaciones podría insistir en la necesidad de respuestas más claras y una gestión de crisis más coherente.
