El diputado nacional Emiliano Estrada, quien técnicamente es un prófugo de la justicia federal, sobre la recta final de campaña ha tenido la peregrina idea de culpar al gobernador Gustavo Sáenz de ser el responsable de la violencia en Salta. En la causa federal a la cual no quiere ir a sentarse al banquillo por la sencilla razón de que se quedó sin argumentos, quedó demostrado que el longilíneo diputado disfrutaba ordenando lanzar fake news contra el gobernador y toda persona que no le simpatizara. El contenido de esas fake demuestra una personalidad decididamente partidaria por la violencia sin límite, y además una gran oscuridad al actuar de manera solapada para no dar la cara. Una constante como la del tero de gritar en un lado y hacer el nido en el otro. El nido no los huevos. Hoy es 17 de octubre, un día especial para quienes adhieren al ideario peronista y el chiste más escuchado fue: más solo que Emiliano en el Día de la Lealtad, seguramente por su manera ubicua que en los últimos cuatro años lo hizo rotar de Sáenz a Olmedo, y de Olmedo a Urtubey, sin tocar tronera. Como si pertenecer al dueño del carozo fuese lo mismo que militar para la supuesta víctima de una bala tan perdida que ni siquiera se sabe si salió o entró o si entró y salió. En fin, o como dicen los chicos, tal vez será bala. Nada se sabe.
En cualquier caso, la renuencia a presentarse en la justicia federal por un hecho que ya quedó demostrado que es culpable y buscar cualquier pretexto para eludir esa instancia, refleja un alma divorciada con la paz. Está claro que debe ser difícil tener paz interior después de demoler a Sáenz con fake news sabiendo que lo hizo diputado nacional solamente hace cuatro años y apenas fue elegido, salió en el acto a buscar nuevos aliados para estorbar la tarea del gobernador ¿Qué se ve en la forma de actuar de Sáenz? Muchas sonrisas y tranquilidad, una forma despojada que le permite acercarse y disfrutar de la gente y agitar un poncho como bandera, convencido de que lo primero es Salta, las obras para Salta que, al revés del oscuro diputado longilíneo, lo desvelan ¿Se sabe que Estrada haya apoyado alguna gestión de obras nacionales para nuestra provincia? Positivamente de ninguna. Únicamente lo motivan las fake y de culpar al gobernador de mala fe, porque el discurso violento en este país lo instalaron otros. Cuando habla Sáenz, toma el micrófono y se emociona hasta las lágrimas. No insulta: propone y convoca a sumarse a su proyecto. A Estrada solamente se lo escucha injuriar o echar culpas que, si las meditase, se daría cuenta de su propia falencia, porque tampoco se le conoce ninguna gestión porque se mejore la seguridad de la provincia; lo cual es justamente resorte del Estado Nacional.
Probablemente la memoria ayude a quienes tengan que votar, a darse cuenta de cómo actuó cada uno, El gobernador que en su momento lo hizo diputado, apenas recibió injurias, difamaciones culpas que no le son propias; del otro lado podrá observar que Gustavo Sáenz recorrió cada rincón de la provincia, buscando un solo consenso: el bienestar y lo mejor para todos los salteños. Bastantes diferentes los comportamientos.