La ciberdelincuencia representa una amenaza cada vez más grave, especialmente cuando involucra la explotación sexual de niños. Un reciente informe alerta sobre redes delictivas que utilizan plataformas como WhatsApp para captar a niños, niñas y adolescentes, con el objetivo de obtener material de abuso sexual infantil. Según la información recabada, los delincuentes crean grupos de WhatsApp con nombres como “Metan gente” o “Tenemos que llegar a 2000”, donde desafían a los menores invitar a más contactos. Una vez integrados en estos grupos, los administradores comparten contenido ilegal y ofrecen dinero a cambio de que los participantes envíen material de abuso y explotación sexual. Esta problemática exige una atención urgente. Las autoridades han emitido recomendaciones dirigidas a padres y responsables de menores, con el fin de reforzar las medidas de seguridad en el uso de WhatsApp. Entre ellas, se destaca ajustar la configuración de privacidad para que solo los contactos conocidos puedan agregar al usuario a grupos.
La ciberdelincuencia relacionada con la explotación sexual infantil constituye una grave violación de los derechos de los niños y adolescentes. Es crucial que la sociedad en su conjunto, desde las familias hasta las instituciones, tome acciones decididas para proteger a los más vulnerables y combatir estos delitos en el entorno digital.