Un reciente estudio del Institut de Recerca del Hospital del Mar (Barcelona) revela que las personas hospitalizadas por problemas de salud mental enfrentan un riesgo significativamente mayor de suicidio tras ser dadas de alta. Publicado en la prestigiosa revista Jama Network Open, el análisis abarcó a casi 50.000 pacientes ingresados entre 2014 y 2018, destacando la necesidad urgente de un enfoque integral en la atención post-hospitalaria.
El estudio muestra que las mujeres que han sido hospitalizadas tienen un riesgo 48 veces mayor de suicidio en comparación con la población general femenina, mientras que en los hombres el riesgo es 28 veces más alto. Los investigadores utilizaron datos del Programa d’Analítica de Dades per a la Recerca i la Innovació en Salut (Padris) y del Instituto Nacional de Estadística (INE) para llevar a cabo este análisis.
Impactantes cifras sobre la salud mental y el suicidio
Durante el seguimiento, que se extendió hasta finales de 2019, el 4,6% de los pacientes estudiados falleció prematuramente, con un 1% (437 personas) que se quitó la vida y cerca del 10% sufrió un episodio de autolesión no letal. Según Jordi Alonso, coordinador del Grupo de Servicios Sanitarios del Hospital del Mar, estas cifras, aunque bajas en términos absolutos, reflejan una mortalidad significativamente elevada en personas con trastornos mentales.
Diferencias entre hombres y mujeres
El riesgo de suicidio varía dependiendo del tipo de trastorno y el género del paciente. En las mujeres, el riesgo es mayor en casos de trastorno bipolar y depresión, mientras que en los hombres los trastornos adaptativos y la depresión están más asociados con el riesgo de suicidio. Alonso subrayó la necesidad de crear estrategias preventivas más personalizadas, considerando que las mujeres tienen una mayor propensión a buscar atención psiquiátrica y que la depresión en hombres suele estar infradiagnosticada.
Mortalidad prematura y causas subyacentes
El estudio también destaca que la mortalidad prematura, definida como la muerte antes de los 70 años por diversas causas, es 7,5 veces más alta en hombres y 7,7 veces en mujeres que han sido hospitalizados por trastornos mentales. Los trastornos cognitivos como la demencia y el consumo excesivo de alcohol se destacaron como los factores más prevalentes entre los pacientes.
Un abordaje multidisciplinario
El investigador Philippe Mortier enfatiza que la población que recibe el alta de una hospitalización psiquiátrica necesita una atención integral que incluya tanto la salud mental como otros factores de riesgo para prevenir muertes prematuras y conductas suicidas. “Esta población es altamente vulnerable y requiere un enfoque multidisciplinario”, advirtió Mortier.
Este estudio resalta la importancia de reforzar las políticas de salud mental y ofrecer apoyo constante a las personas que han atravesado una hospitalización psiquiátrica para mejorar su calidad de vida y reducir el riesgo de suicidio.