Despidos en la Biblioteca Nacional Mariano Moreno

Hubo 120 despidos en la Biblioteca Nacional, los trabajadores piden reincorporar a los despedidos para darle continuidad a los programas.

La Biblioteca Nacional es una institución bicentenaria, fue creada en 1810, contó con directores consagrados en el mundo literario como José Mármol, Paul Groussac y Jorge Luis Borges, entre otros. Es por excelencia el espacio de investigación y conservación de libros y archivos gráficos más importante del país, con libros y tomos que pertenecieron a Manuel Belgrano o José de San Martín, entre otros.


Los despidos no sostuvieron un criterio claro, y los daños afectan a sectores enteros. Los trabajadores se reunieron para generar acciones y tomar medidas, se organizan para poner un freno a los despidos y pedir la reincorporación de sus compañeros. Sostienen que se está poniendo en riesgo la memoria de los argentinos. Mas de 10.000 escritores, artistas, actores y periodistas firmaron un documento en defensa de la Biblioteca Nacional Mariano Moreno.

Despidos que duelen como es el caso de Roberto Casazza, son ejemplos del criterio poco claro que tuvieron. Es doctor en Humanidades con orientación en filosofía, investigador de referencia a nivel global de bibliografías de los siglos XV AL XVIII y especialista en manuscritos medievales, durante 27 años sostuvo su lugar de trabajo en la Biblioteca. Hay mucha gente valiosísima en la misma situación que yo, expresó el investigador. Miles de firmas piden por su reincorporación, se trata de una iniciativa de sus colegas de la UBA, las firmas son nacionales e internacionales.


Es evidente que la batalla cultural a la que se refieren los integrantes de la Libertada Avanza, está dirigida a la destrucción del patrimonio cultural del País, de sus investigadores y trabajadores de la cultura. La formación de Casazza como de muchos trabajadores de la Biblioteca Nacional, le ha costado al Estado Argentina una gran inversión en sus formaciones profesionales, y por supuesto estas personas son el testimonio de lo irremplazable y valiosos que son sus aportes, sus investigaciones y sus trabajos.


¿Quién piensa en el lector? Hasta ahora solo los trabajadores desvinculados de la Biblioteca, que saben gracias a sus formaciones y a sus trayectorias que el eje de cualquier proyecto civilizador es el lector. Un pueblo sin memoria es un pueblo arrojado al abismo, un pueblo que no lee es un pueblo que no tiene salvación.

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