El Papa Francisco se tomó un tiempo para visitar la Iglesia de San Agustín en la previa del 28 de agosto, solemnidad en la que se conmemorará a una de las figuras más importantes para los católicos. Cada año y sobre el final del octavo mes, se rinde homenaje a uno de los santos patronos de Roma y fundadores de la doctrina. La jornada resulta clave para la orden agustina.
El referente eclesiástico se tomó un rato de jornada para realizar una visita discreta al templo ubicado en el corazón de Roma. En la previa de la festividad agustina, el excardenal Jorge Bergoglio se acercó a la iglesia de San Agustín donde se conservan los restos de la madre del obispo de Hipona, Santa Mónica. Esta reconocida figura se conoce como la imagen de la conversión por su gran impulso para que San Agustín se acerque al catolicismo. Por eso, la Oficina de Prensa del Vaticano contó que el sumo pontífice “se detuvo en oración en la Capilla donde se conservan los restos de la Santa Mónica”.”Ante la imagen de Nuestra Señora de los Peregrinos, (el obispo de Roma) saludó a los frailes, monjas y peregrinos presentes y luego regresó al Vaticano”, informaron.
Francisco decidió homenajear a este santo católico por su gran influencia en todo el mundo. La orden agustina es referencia en América Latina y todo el planeta por su gran tarea educadora. Cientos de colegios están a su cargo, así como también obras sociales.