El Papa León XIV expresó su profunda preocupación por la situación en Gaza y reafirmó su compromiso con el envío de ayuda humanitaria a la población afectada. En su primera Audiencia General en la Plaza de San Pedro, el pontífice hizo un enérgico llamado a detener el conflicto y abrir corredores seguros para facilitar la asistencia a niños, ancianos y personas enfermas.
Desde el atril central, ante miles de fieles congregados en el Vaticano, el Papa subrayó la gravedad de la crisis en la Franja de Gaza y solicitó a la comunidad internacional que tome medidas urgentes para aliviar el sufrimiento de los civiles. “Reitero mi llamamiento a poner fin a la guerra y a facilitar el ingreso de ayuda esencial a quienes más lo necesitan”, afirmó.
La intervención del pontífice sirvió como una fuerte exhortación a los actores involucrados para priorizar la protección de la población civil y garantizar el acceso a asistencia humanitaria en medio del conflicto. La preocupación del Papa refleja la gravedad de la situación y el clamor mundial por un acceso urgente a la ayuda en Gaza.