El Ministerio de Economía definió una suba del 6,2% a más del 6,4% en la sobretasa que pagan cerca de la mitad de los usuarios para financiar los subsidios en las zonas frías. El Gobierno de Javier Milei oficializó en las últimas horas dos medidas que van en línea con su agenda de ajuste fiscal y desregulación del mercado energético, en medio de la crisis de abastecimiento de gas natural que se extenderá al menos hasta el viernes en toda la Argentina.
El Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) aplicó este miércoles un aumento en el recargo que se le cobra a más de la mitad de los usuarios del país para financiar los subsidios que reciben los beneficiarios del régimen para quienes viven en “zona fría”, en línea con la premisa de reducir los aportes del Tesoro Nacional. Además, el Poder Ejecutivo eliminó los precios de referencia para las garrafas, junto con otras iniciativas para desregular el mercado de Gas Licuado de Petróleo (GLP).
En el caso del esquema de zona fría, hasta el mes pasado se aplicaba un recargo del 6,2% sobre el componente del precio del gas (Punto de Ingreso al Sistema de Transporte -PIST-) en las facturas finales y desde julio será del 6,4% a partir de la Resolución 444/2025 del Enargas. Fue el tercer incremento del año, ya que el porcentaje había iniciado en 5,44%, saltó al 6% en abril y en junio tuvo la última suba. Aún no se informó en qué porcentaje impactará este recargo sobre las facturas que pagarán los usuarios.
Este régimen fue creado para morigerar el impacto de las tarifas en regiones con temperaturas invernales más extremas, y su financiamiento depende en gran parte de un recargo adicional aplicado al resto de los usuarios residenciales del país. El aumento del porcentaje de este recargo busca cubrir el costo creciente de ese beneficio, en un contexto de reducción de los aportes directos del Tesoro. La premisa es que el esquema sea “autosustentable”, lo que implica trasladar mayor parte del costo a los usuarios fuera de las zonas frías.
El Fondo Fiduciario para Subsidios de Consumos Residenciales de Gas, que solventa estos descuentos, había sido ampliado en 2021 para abarcar a más provincias y localidades, especialmente del centro y norte del país, tras un acuerdo político que incluyó a legisladores de distintas fuerzas pero que fue impulsado por Máximo Kirchner. Esa extensión generó que más de cuatro millones de hogares quedaran alcanzados por rebajas de entre 30% y 50% en la factura de gas, con un peso fiscal que el Gobierno de Milei ahora considera excesivo. Según la visión oficial, la ampliación obedeció más a fines electorales que a criterios técnicos vinculados al clima.
En este escenario, el Ministerio de Economía analiza alternativas para reformular o incluso revertir parte de esa ampliación del régimen, argumentando que es inviable seguir sosteniendo un esquema tan extendido con subsidios cruzados cada vez más onerosos. Funcionarios del área energética admiten que trabajan en un rediseño del beneficio para focalizarlo en las zonas con temperaturas realmente más bajas, aunque todavía no hay una definición sobre los cambios concretos ni plazos para su aplicación.
Además, el Gobierno identificó recientemente a 137.842 usuarios residenciales del régimen de zona fría que tenían más de un medidor con el beneficio del 50% de descuento. Ante esa situación, la Secretaría de Energía dispuso un ajuste para reducir el beneficio al 30% en los medidores adicionales, manteniendo el descuento mayor solo en el domicilio principal. Con este recorte buscan limitar filtraciones y hacer más eficiente el uso de los recursos destinados a sostener el esquema.