La misión Polaris Down será la prueba de fuego para reconocer si esta protección elaborada por la empresa de Elon Musk es segura para llevar millones de personas al espacio. SpaceX, la empresa espacial de Elon Musk prepara su misión espacial Polaris Down que busca alcanzar la primera caminata en el espacio de cuatro astronautas liderados por Jared Isaacman, empresario y filántropo. Esta expedición tiene la intención de explorar nuevas tecnologías de trajes aeroespaciales, y revisar las posibilidades de ampliar el turismo al exterior de la Tierra.
La arriesgada misión contará con una tripulación que pasarán cinco días en el espacio, llegando a una distancia de 1400 kilómetros de la Tierra. Esta es una altitud mayor en comparación con las alcanzadas por otros turistas espaciales: los vuelos suborbitales de Virgin Galactic alcanzan los 80 km, los cohetes de Blue Origin, de Jeff Bezos, llegan a los 100 km, y los visitantes de la Estación Espacial Internacional suelen llegar a los 400 km. Asimismo, contará con la seguridad y tecnología de los trajes espaciales de SpaceX, que están estableciendo un nuevo estándar para las misiones de actividad extravehicular, conocidos como EVA.
En la última versión presentada por la empresa espacial, se destacan varias innovaciones orientadas a garantizar la protección y comodidad de los astronautas durante sus misiones. Uno de los avances más sobresalientes del nuevo traje espacial de SpaceX es su casco, fabricado mediante impresión 3D. Este casco cuenta con una visera diseñada para reducir el resplandor solar, lo que contribuye a mejorar la visibilidad y seguridad del astronauta en el espacio. Además, está equipado con una pantalla frontal (HUD) y una cámara integrada que proporcionan datos cruciales como presión, temperatura y humedad relativa dentro del traje, información vital para garantizar la integridad del astronauta.
Para asegurar la máxima seguridad en el entorno hostil del espacio, el traje EVA incluye avanzados sellos y válvulas de presión que aseguran una presurización constante. Este diseño es esencial para proteger a los astronautas de los peligros asociados con la exposición al vacío espacial. Se presta especial atención a la hermeticidad del traje, porque cualquier falla en este aspecto podría resultar fatal. Otro aspecto notable de estos trajes es su diseño escalable, lo que permite personalizar ajustes para diferentes tipos de cuerpo, asegurando así que cada astronauta pueda moverse y operar con la máxima eficiencia y comodidad.