Salta renovó su Pacto de Fidelidad con el Señor y la Virgen del Milagro

El pueblo salteño vivió una jornada emotiva: miles de fieles se congregaron para renovar su Pacto de Fidelidad y Amor con los Santos Patronos, el Señor y la Virgen del Milagro, bajo el lema “Milagro, camino del encuentro y la esperanza”. 

El gobernador Gustavo Sáenz, acompañado por su esposa Elena Cornejo, presidió la procesión que arrancó al sonar de las campanas. Desde la salida de la Cruz Mayor, la Virgen de las Lágrimas, la Virgen del Milagro y el Señor del Milagro, el cortejo avanzó hacia la explanada de la Catedral. 

Multitudes se unieron al recorrido hasta llegar al Monumento 20 de Febrero, donde monseñor Mario Cargnello ofició la ceremonia central. En su discurso, hizo un llamado urgente a renovar la esperanza en un mundo convulsionado por guerras, desencuentros, promesas incumplidas y dolor. 

Monseñor Cargnello puso énfasis en la importancia de la paz, el respeto y los vínculos sanos, especialmente entre los jóvenes. También instó a los dirigentes políticos a abandonar los insultos y mostrarse unidos, pues “nuestro pueblo merece ver que sus líderes se respetan”. 

En el momento culminante, se hizo la renovación del Pacto de Fidelidad: “Vos dulce Jesús, serás siempre nuestro y que nosotros seremos siempre tuyos… Señor del Milagro salvad y bendecid a nuestro pueblo”. Luego se pidió la protección de la Virgen María como madre y abogada. 

La procesión continuó hasta el santuario, donde las imágenes fueron recibidas con repique de campanas. Antes de su ingreso, se otorgó la indulgencia plenaria en este Año Santo. La ceremonia concluyó con pétalos cayendo del cielo y pañuelos ondeando al paso de las imágenes.