La justicia intervino luego de que el joven enviara una foto con un arma larga y anunciara que cometería un ataque al día siguiente. Durante varios días, el adolescente había estado enviando mensajes intimidatorios a sus compañeros, lo que llevó a la directora de la escuela a denunciar el caso ante la policía. La justicia caratuló el hecho como supuestas amenazas y ordenó la detención del menor, notificando a sus padres para que se presenten ante las autoridades. El Ministerio de Educación está evaluando la situación y considera la intervención de profesionales especializados debido a la gravedad del incidente. La Fiscalía ha dispuesto la detención del joven mientras se investiga el caso de violencia escolar.