En un contexto de creciente tensión política en Venezuela, el presidente Nicolás Maduro ha lanzado una sorprendente advertencia contra la popular aplicación de mensajería WhatsApp. Durante una manifestación chavista, Maduro anunció su intención de “romper relaciones” con la plataforma, acusándola de ser utilizada para amenazar a militares, policías y líderes comunitarios que apoyan su controvertida reelección.
“Voy a eliminar mi WhatsApp de mi teléfono para siempre”, declaró el mandatario, instando a sus seguidores a abandonar progresivamente la aplicación en favor de alternativas como Telegram o WeChat. Maduro argumentó que WhatsApp está siendo utilizada para “amenazar a Venezuela” y a quienes lo respaldan.
Esta declaración se produce en un momento de alta tensión nacional, con acusaciones generalizadas de fraude en las recientes elecciones y manifestaciones masivas de la oposición. El presidente venezolano ya había expresado previamente su preocupación por el uso de redes sociales para promover la “división” y el “odio” entre los venezolanos, señalando específicamente a Instagram y TikTok.
Maduro ha solicitado públicamente recomendaciones a sus funcionarios de seguridad para regular el uso de las plataformas sociales, en las que se han difundido imágenes y videos de las protestas contra su reelección, así como denuncias sobre operativos de seguridad que, según el propio mandatario, han resultado en más de 2.000 detenciones.
Es importante recordar que en Venezuela, la difusión de “mensajes de odio” en redes sociales puede conllevar penas de entre 10 y 20 años de cárcel, según una ley aprobada en 2017.
Esta situación plantea interrogantes sobre el futuro de la libertad de expresión y el acceso a la información en Venezuela, en un momento en que el país enfrenta una crisis política y social sin precedentes.