Cada 25 de noviembre, el mundo conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Esta fecha sirve como un poderoso recordatorio de que aún falta mucho por hacer para alcanzar la igualdad y erradicar los abusos que sufren millones de mujeres y niñas a diario.
La violencia de género sigue siendo una pandemia global que adquiere múltiples formas: desde la violencia física y sexual hasta la emocional, económica y psicológica. Mujeres de todas las edades, clases sociales y orígenes enfrentan acoso, agresiones, trata de personas y feminicidios solo por el hecho de ser mujeres.
Esta violencia tiene raíces profundas en sistemas patriarcales que cosifican y subordinan a la mujer. Lamentablemente, en muchos países persisten actitudes, leyes y prácticas que normalizan y perpetúan estas formas de violencia. Es urgente que los gobiernos, las instituciones y la sociedad en su conjunto asuman su responsabilidad y den pasos concretos para erradicarla.
Hoy, más que nunca, deben existir políticas públicas efectivas, mayor inversión en programas de prevención, protección y atención a víctimas, y un cambio cultural profundo que cuestione los estereotipos de género y promueva el respeto y la igualdad. Solo así, se puede pensar en construir un mundo más justo y seguro para todas las mujeres.
El Día Internacional de la Lucha contra la Violencia hacia la Mujer tiene como objetivo sensibilizar, denunciar y reclamar políticas públicas para erradicar la violencia que se ejerce sobre las mujeres alrededor del mundo.
Fue instituido por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 17 de diciembre de 1999, en conmemoración al asesinato de las hermanas Mirabal ocurrido en 1960 en la República Dominicana.
La violencia contra las mujeres y las niñas sigue siendo una de las violaciones de los derechos humanos más extendidas y generalizadas del mundo. Se calcula que, a nivel global, casi una de cada tres mujeres han sido víctimas de violencia física y/o sexual al menos una vez en su vida.
En 2023, alrededor de 51.100 mujeres y niñas de todo el mundo murieron a manos de sus parejas u otros miembros de su familia. Es decir, se asesinó a una mujer cada 10 minutos. Mientras que en Argentina desde el año 2023 han ocurrido 241 femicidios.
Se trata de una falta que se ha intensificado en diferentes entornos, incluidos el lugar de trabajo y los espacios en línea, y se ha visto agravada por los conflictos y el cambio climático.
La solución radica en acabar con la impunidad, adoptar y financiar planes de acción e invertir en soluciones que proponen los movimientos por los derechos de las mujeres.