La reciente intervención de Nicky Jam en una mitin de Donald Trump ha generado un torbellino en la industria musical, llevando a la banda mexicana Maná a desvincularse de su colaboración con el reguetonero, acusándolo de racismo.
Visiblemente entusiasmado, Nicky Jam se dirigió al escenario con una gorra que decía “Make America Great Again” y, tras un efusivo saludo al exmandatario, pronunció un discurso que dejó a muchos boquiabiertos: “Es un honor conocerlo, señor presidente. Te necesitamos. Te necesitamos de vuelta, ¿verdad? Te necesitamos para que seas el presidente”. Estas palabras provocaron una oleada de críticas entre sus seguidores y otros artistas.
Uno de los eventos más significativos de esta controversia fue la drástica decisión de la influyente banda mexicana Maná, que anunció el retiro inmediato de su colaboración con Nicky Jam en plataformas digitales, declarando: “No trabajamos con racistas”. Este pronunciamiento dejó en claro el descontento de la banda hacia el posicionamiento político del reguetonero, un gesto que muchos interpretan como un acto de defensa a principios y valores.
La confusión y el apoyo de Nicky a Trump no solo causaron revuelo en el ámbito musical sino que también se convirtió en un punto focal para el debate sobre la influencia de las celebridades en la política. Al poco tiempo de que el clip de la presentación se volvió viral, el artista compartió un meme en su Instagram sobre el incidente, aunque esto no evitó que las críticas continuaran creciendo en su contra.
Artistas como J Balvin y Justin Quiles expresaron su apoyo a Nicky, pero muchos fanáticos manifestaron su decepción, recordando los tiempos en que el cantante había alzado la voz en defensa de derechos migratorios, especialmente en su apoyo a los beneficiarios de DACA frente a las amenazas. de Trump. Adrián Escárate, un defensor de los derechos de los inmigrantes, compartió su desencanto, escribiendo en redes sociales que Jam solo lo había usado para promocionar su música, dejando a su comunidad atrás.
